A continuación se presentan las imágenes del proyecto ganador en la categoría estudiantes del III Certamen Porcelanosa Interiorismo. Se trata de un loft de 70m2 en el que se produce una dualidad entre el espacio privado y público, pero siempre manteniendo los espacios comunicados propios del concepto loft.
Planta
Para entender un poco más el proyecto hay que explicar que la combinación de Noh y Kyogen se conoce como el arte del teatro Nohgaku. Completamente opuestos en idea, trama y expresión, realzando su efecto a través del contraste. De igual modo ocurre en este loft en el que se produce una dualidad espacio privado-espacio público, individual-colectivo, recogimiento-esparcimiento, manteniendo los espacios abiertos y comunicados propios del concepto de loft.
Sección longitudinal de la vivienda con el mobiliario recogido y contraventanas cerradas
Sección longitudinal de la vivienda con el mobiliario desplegado y contraventanas abiertas
En un gran cubo marmóreo vaciado se "insertan" 3 cajas de madera que conforman los espacios del escenario Noh (cuarto del espejo-despacho,puente-zona de paso,escenario-dormitorio), el cuarto espacio (camerino-baño-vestidor) lo conforma el propio vaciado del mármol. La aparición de los "actores" se realiza desde el cuarto del espejo (despacho) atravesando el puente (zona de paso) hasta el escenario (dormitorio). El viejo pino y bambú pintados que sirve de fondo a todas las obras es sustituido por un dosel realizado en mosaico.
Triple vista del espacio Noh: diáfano, sofás y sofás + mesa comedor
Aproximación al estudio: posición cerrada, con la contraventana y escritorio abiertos y vista cercana
Vista del baño-vestidor. A la izquierda lavabo-ducha y ofuro (bañera japonesa). A la derecha armario.
La zona pública, Kyogen, ideada de forma opuesta a la anterior, está completamente abierta. Un único espacio polivalente, compartido y para compartir. Al igual que bajo el escenario de Nohgaku se esconden vasijas de barro para potenciar la resonancia de las canciones y el sonido de los pasos de los actores, aquí escondemos los sofás, la mesa y sillas del comedor, elementos de almacenamiento y ocio (futbolín, bicicletas, banco de pesas y abdominales...) según prefieran los actores-residentes y público-invitados) multiplicando la riqueza de tramas representados en estos entremeses.
Este segundo escenario se transforma liberando espacio para una fiesta, reunión, sesión de yoga... o tomándolo para conversar en los sofás, cenar, jugar al futbolín, ponerse en forma con las pesas o con la bicicleta estática... Un dualismo de funciones y espacios unidos por un diseño austero, lejano de alardes y retóricas, rico en espacios y calidad de materiales proporcionados por Porcelanosa. 
